BREVE HISTORIA DEL YOGA - parte 1


1. Qué es el yoga tradicional:
Según el pensamiento hindú, nuestra forma habitual de vivir es lo que se llama saṃsāra, la existencia cíclica, caracterizada por: la insatisfacción (no felicidad plena); que se debe a la imposibilidad de satisfacer todos nuestros apegos (o deseos compulsivos); que proceden de la ignorancia (avidyā) de nuestra naturaleza trascendente. Realizamos acciones para satisfacer los deseos; estas acciones producen saṃskāras (impresiones inconscientes), que causan vāsanās (tendencias latentes; hábitos de acción). Tradicionalmente, esta descripción de la condición humana va unida a la creencia en la ley del karman (=las acciones buenas nos llevan a situaciones buenas y las malas a situaciones malas) y en la reencarnación; pero no es esencial creer en estas para aceptar la descripción básica de la existencia cíclica. 

La liberación de esa situación deficiente se logra mediante el conocimiento experiencial de nuestra verdadera naturaleza. Ese conocimiento hace que se superen los apegos y de ese modo se alcance un modo de existencia caracterizado por la ecuanimidad, la libertad interior y la empatía con los otros seres. 

Se llama «yoga» en sentido estricto a cualquier camino espiritual (mārga) hindú que insista en la práctica del autocontrol psicofísico y la concentración mental como los medios principales para llegar a la liberación. Esta forma de yoga incluye, por ejemplo, el yoga clásico y los yogas tántricos. 

En sentido amplio, el yoga es cualquier camino hinduista hacia la liberación, como los caminos de la devoción, el conocimiento, la meditación, la acción, etc. En este sentido amplio, el yoga es lo mismo que la espiritualidad hinduista. 

2. Etapas de la tradición del yoga: 
a) Yoga preclásico 
Incluye el yoga de las upaniṣads (siglos VII-III AEC —todas las fechas son meras aproximaciones—) y el yoga de las epopeyas (Mahābhārata y Rāmāyaṇa; ss. IV AEC-IV EC), sobre todo el de la Bhagavadgītā (s.II AEC), que es el capítulo principal del Mahābhārata y el texto más popular del hinduismo. 

b) Yoga clásico 
Es el que se recoge en los Yogasūtras («Aforismos sobre el yoga») de Patañjali (s.II EC) y sus comentarios. El principal comentario es el Yogabhāṣya de Vyāsa. 

c) Yoga postclásico 
El vedānta es la escuela filosófica y espiritual del hinduismo basada en las enseñanzas de las upaniṣads, que se sistematizaron en los Brahmasūtras («Aforismos sobre lo Absoluto», s.IV EC). Hay distintas escuelas del vedānta. Las más conocidas son el advaita vedānta (ved. adualista), cuyo principal representante es Śaṅkarācārya (s.VII EC); el viśiṣṭādvaita vedānta (ved. adualista con diferencias), de Rāmānuja (s. X); y el dvaita vedānta (ved. dualista) de Mādhva (s. XII). 
También hay yoga en los purāṇas (compendios de mitología y espiritualidad; ss. II-XV EC; el más popular actualmente es el Śrīmad Bhāgavata Purāṇa); en los tantras (desde el s. VI EC); y en diversas corrientes «sectarias» del hinduismo: los śaivas o devotos de Śiva (como por ejemplo los nāths o el Śaivismo de Cachemira), los vaiṣṇavas (devotos de Viṣṇu), los śāktas (devotos de Śakti, la Diosa), etc. 

3. Yoga del conocimiento (jñāna yoga): 
Es la forma más antigua de yoga. Se encuentra en las upaniṣad, el advaita vedānta, el Śaivismo de Cachemira, etc. Aquí vamos a resumir la versión más conocida, que es la del advaita vedānta. 

El yoga del conocimiento afirma la adualidad (advaita) de lo real: solo hay una Realidad Absoluta: el Brahman, que es sac-cid-ānanda (la única Realidad Eterna; la Conciencia Universal en la que aparecen todas las cosas; la Felicidad o Plenitud total). Ese Brahman es mi verdadero ser (ātman): «Yo soy el Brahman». Y es el verdadero ser de todas las cosas: «Todo esto es el Brahman». 

La enseñanza del advaita vedānta se resume en esta frase: «El Brahman es lo Real (satya: lo absoluto, eterno), el mundo es falso (mithyā: relativo, transitorio) y el ātman es el Brahman». 

Los individuos estamos sumidos en la ignorancia, a la que también se llama māyā (la «ilusión» cósmica) porque nos hace percibir la realidad equivocadamente: creemos que somos un yo individual (jīva) que vive en un mundo (jagat) múltiple gobernado por Dios (Īśvara). Esta visión es errónea porque confundimos el jivātman (yo individual, relativo, falso), con el paramātman (Yo Supremo, nuestro verdadero ser, que es el Brahman). En realidad el individuo, el mundo y Dios no son otra cosa que apariencias del ātman-brahman indivisible. 

La práctica del yoga del conocimiento consiste en la autoindagación (ātmavicāra), es decir, en investigar quién soy yo. Eso se realiza en tres fases: 1) Escuchar la enseñanza vedántica de labios de un maestro que la haya asimilado. 2) Reflexionar personalmente sobre esas enseñanzas. 3) Cuando se haya comprendido suficientemente dicha enseñanza, meditar sobre ella, manteniendo en la mente esa comprensión hasta que se asimile completamente y se vuelva espontánea. Para comprender y asimilar las enseñanzas del vedānta es necesario tener una mente pura. Dicha purificación se puede lograr mediante la práctica de karman (la acción correcta: el yoga de la acción) y upāsanā (la concentración: los yogas de la devoción, el autocontrol psicofísico, etc); es decir, mediante la práctica de los otros yogas. 

Continuará...

- Texto: autor, Javier Ruiz Calderón.
- Imagen: arte de Maniam Selven.

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